Hace unos días me sentí algo introspectiva y quise leer una agenda donde me descargo cuando siento mi energía bajita, es un hábito que tomé desde hace algunos años al iniciar mi viaje interior, y al leerla vinieron a mi mente dos ideas:
La primera es que he atravesado por momentos difíciles, pero también los he superado todos, siempre saliendo más fuerte y un poco más sabia, o al menos así me siento yo, a pesar de que aún comenta “errores”. No pude evitar regalarme una sonrisa y abrazarme, agradecí por los aprendizajes que han salido de estas etapas o episodios de mi vida y también me sentí un poco más fuerte y determinada a seguir transitando por todo lo que la vida me presente.
El segundo pensamiento, o más bien, el descubrimiento que tuve al leer esta agenda, es que he sido muy dura conmigo misma durante estas etapas, noté cómo me he castigado por los desatinos que haya podido cometer, lo que definitivamente no me ayudó a superarlas. También me fijé, en cómo este comportamiento, el de castigarme, lo he hecho de manera inconsciente, no solo en estas etapas complejas, sino de manera constante, yo misma me he hundido un poco más cuando he estado abajo, y aún, estando arriba, esta loca de la casa(como le llamo yo a la voz en mi cabeza), ha salido a decirme que no soy suficiente y otras tantas locuras que me restan poder y capacidad de creación.
Te cuento esto, porque me puedo imaginar que de alguna manera puedes sentirte identificada, y es que pienso que a las mujeres nos cuesta ser autocompasivas, habitualmente confundimos esta cualidad con sentir lástima por nosotras mismas, ser débiles o permitirnos el no avanzar; sin embargo, la verdad de la autocompasión es que nos permite reconocernos vulnerables para después poder avanzar. Sentir autocompasión, es abrir el espacio para sentirnos sostenidas y seguras, entendiendo que no somos perfectas, pero que siempre hacemos lo mejor que podemos, sin detenernos.
Dicho lo anterior, permíteme decirte mujer, que eres poderosa, en ti habita una inconmensurable capacidad de crear, y no me refiero necesariamente a la capacidad de crear vida dentro de tu cuerpo, me refiero al poder que te habita para convertir en magia todo lo que te rodea.
No sé si ya lo has notado, pero, logras transformarlo todo, haces de cada momento y de cada espacio en el que te encuentras, más bello cuando embelleces tu mente y tu corazón.
Es por esto, que quiero invitarte a que juntas despertemos y/o reafirmemos nuestro poder interior a través de la energía que emana de las palabras, vamos a tomar consciencia del poder de los pensamientos y de las palabras, así como de la influencia que tienen estos dos componentes en el proceso de manifestaciónyvamos a construir un nuevo modo de pensar y comunicarnos, para que cada día construyamos una realidad más feliz, libre y en paz, o como le llamo yo: Una realidad Viverada.
¡Espero verte pronto!
Blogger invitada, Vanesa ViVa
Conócela en sus redes sociales haciendo click aquí
Quiero conocer los productos BLOOM