En los últimos años ha habido un gran auge del feminismo como un movimiento pop, es decir, tanto la palabra, como el movimiento se han vuelto masivos, tanto, que muchas personas y marcas han acuñado al feminismo como eje de sus prácticas y activismo. Ahora vemos la palabra “feminismo” en desfiles de moda, series de televisión, canciones y algunas celebridades se han empezado a denominar públicamente como parte del movimiento, pero incluso con esta popularidad del feminismo muchas personas aún le tienen miedo a la palabra y a autodenominarse como feministas. En este blog te vamos a contar qué es el feminismo, por qué puedes estar siendo feminista sin darte cuenta y la relevancia de perderle el miedo a reconocernos públicamente como feministas.
A muchas personas les da miedo, pena o se sienten incómodas al reconocerse como feministas por la cantidad de estigma y desinformación que hay alrededor del tema
Muchas veces cuando hablamos de feminismo es común que nos encontremos con respuestas como: “yo creo en la igualdad de género y en la lucha por los derechos de las mujeres, pero eso no me hace feminista” o “creo en la importancia de la igualdad de género, pero me da miedo ser feminista”. Muchas veces (aunque puede que no en todos los casos), a muchas personas les da miedo, pena o se sienten incómodas al reconocerse como feministas por la cantidad de estigma y desinformación que hay alrededor del tema. El feminismo es una lucha histórica por los derechos de las mujeres, actualmente se encuentra en su cuarta ola y si bien muchas de sus luchas han cambiado, ya que no solo se lucha por los derechos de las mujeres, sino en general por la igualdad y no discriminación basada en el género.
Entonces, entendiendo que parte del miedo hacia el feminismo es por la desinformación, comencemos por hacernos la pregunta más importante ¿Qué es el feminismo? Bueno, para ser un poco más concretas les traemos un fragmento del libro Las mujeres que luchan se encuentran de Catalina Ruiz Navarro: “el feminismo puede ser algo tan sencillo (o profundo) como una lucha social para que todas las personas tengamos derechos humanos. Es importante recordar esto: no todas las personas tienen garantizados todos los derechos, [especialmente] por su género, por su raza, por su orientación sexual o por todas juntas. Por eso también hay muchos feminismos: no todas las mujeres tienen las mismas necesidades, decir “derechos para todas” implica una multiplicidad de realidades. El feminismo es un tema difícil porque denuncia cosas como la explotación, la violencia [entre otros]”. Por lo tanto, el feminismo busca garantizar los derechos de todas las personas, eliminar la discriminación basada en el género y desmantelar distintos tipos de opresiones y violencias de género, raza, orientación sexual, etc.
Entendamos el feminismo no solo como un movimiento activista, sino como toda una teoría y fuente de estudios
También es muy importante que entendamos el feminismo no solo como un movimiento activista, sino como toda una teoría y fuente de estudios. Entender el feminismo como una vertiente teórica es muy importante porque se empieza a estudiar la relevancia, aportes y necesidad de reivindicación de las mujeres y personas no binarias en diferentes áreas del conocimiento como la antropología, sociología, filosofía, economía, arte y en los estudios literarios, incluso, en la actualidad en áreas como la medicina, el diseño y la ingeniería, se han enfocado en entender sus estudios desde un enfoque feminista con la creación de comités de género reivindicando los aportes de las mujeres han ayudado en el desarrollo de estos estudios. Algunas teóricas con las que puedes empezar a estudiar y leer sobre feminismo son Simone de Beauvoir, Judith Butler, Angela Davis, Naomi Wolf, Florence Thomas y Nuria Varela, si tienes alguna recomendación no dudes en escribirnos a @bloomcupcolombia.
El feminismo es muy importante porque no es un discurso de odio en contra de los hombres, sino una forma de defensa de los derechos de las personas, exigiendo que nadie sea agredido o violentado por su raza, género u orientación sexual, además de reivindicar su importancia y papel dentro de la historia de la humanidad. Por esto (y mucho más) debemos dejar los prejuicios a un lado y entender que no es malo reconocernos como feministas y que ser parte del movimiento es una oportunidad para sumar a la multiplicidad de visiones dentro de las distintas formas de feminismo.