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Primera menstruación: guía básica sobre qué decir y qué no decir

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Todxs recordamos nuestra primera menstruación. Vemos por primera vez nuestra ropa interior manchada de sangre y un mundo de emociones empieza a combinarse con un sinfín de preguntas, miedos, inseguridades que se desbordan por nuestra cabeza.

 

¿Conoces a alguien que esté pasando por esta situación? 

Pues bien, al hablar de la menstruación por primera vez hay que hacerlo con cuidado, de manera positiva y con seguridad, ya que este primer acercamiento podría determinar la forma en la que esa persona perciba su cuerpo años después. 

Te presentamos acá una guía básica para abordar la primera menstruación de forma asertiva con esa persona. 

 

No crear un alboroto

Lo primero que debes hacer es mantener la calma, no crear un alboroto. No expreses asombro ni decepción, hazle saber que todo está bien y háblale tranquilamente. Lo importante es hacerlx sentir cómodx y que está en un ambiente seguro. 

Escucha 

Pregúntale acerca de sus preocupaciones, miedos, cómo sucedió, o cualquier otra cosa que quiera contarte. Permítele compartir si está sintiendo dolor, irritación o cambios de humor, y busca soluciones para reducir incomodidades: comida, agua, bolsitas de agua caliente para los dolores, helados, entre otros. Escuchar a la otra persona hará que sepa que eres accesible y eliminará cualquier sentimiento de nerviosismo por el que podría estar pasando. 

Normalizar la menstruación

No impongas tabúes, restricciones y no le prohibas que haga ciertas actividades o deportes. Normaliza la menstruación tanto como puedas, y aclárale que es una parte del crecimiento natural y un signo de que su cuerpo está sano. Es importante que vea la menstruación de un modo realista, y no como algo que sólo le traerá malas experiencias.

Incentiva la auto-imagen positiva

La llegada de la menstruación trae consigo cambios, no sólo emocionales, sino también físicos. Hacerle entender que es una persona hermosa y valiosa es fundamental, que sepa que no tiene que ser de un modo particular para ser lindx, porque ya lo es. Evitar a toda costa comentarios sobre cambios de peso o de su apariencia que puedan hacer que se sienta incómodx consigo mismx. 

Joven con body rojo y flor

Celebrar

Como lo mencionamos anteriormente, la menstruación es señal de que el cuerpo está sano, ¡y eso hay que celebrarlo! Celebrar con pequeños detalles que hagan feliz a esa persona: un kit de menstruación, ver una película, ir a una tienda y navegar por la sección de productos de higiene femenina para que se vaya familiarizando, o incluso, algo tan sencillo como un abrazo. Esto le mostrará que si bien está experimentando algo incómodo, la menstruación es la transición a un tiempo extraordinario en su vida. 



¿Por qué es importante tener estas conversaciones? 


Vivimos en una sociedad donde tres de cada 10 niñas ni siquiera saben qué es la menstruación al momento de su primer período. 

Estas conversaciones son la oportunidad para aprender sobre el sistema reproductivo, la pubertad y el cuerpo femenino. Hablar sobre la anatomía, las hormonas, cambios corporales, y ciclos menstruales ayudan a que se conozcan, a sus cuerpos cambiantes, su privacidad, su seguridad y salud sexual y reproductiva.

Cuando las personas están más y mejor informadas, pueden tomar decisiones más conscientes, responsabilizarse por sí mismas y empoderarse. 

Referencias bibliográficas: 

https://menstrualhygieneday.org/wp-content/uploads/2020/07/APRENDER-PADRES-FINAL_ES.pdf

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